Sabes que la vida a veces no es tan dura contigo cuando te hace encontrarte con personas que traen luz a ella de manera única y especial.
¿Cómo iniciar a hablar sobre ti amor mío?
En primer lugar, le pido disculpas al amor por confundir unos amores fugaces y efímeros, en los amores de mi vida y los que llegarían a cambiar un pedazo de mí. En segundo lugar, le reprocho al destino por no mandarte antes a mi vida quizás unas cuantas desilusiones y corazones rotos atrás, cuando en verdad confiaba plenamente en las personas y el amor en sí, cuando no tenía miedo a ser lastimada.
Encontrarte en ese momento fue luz, pero no sabía, es donde encaja la frase “Aquel que no sabe es como aquel que no ve” en ese preciso instante éramos ciegos tú de la luz que llevabas y yo de lo mucho que te necesitaba.
No sabría cómo explicar el sentimiento que en este instante me hace sentir el tenerte cerca de mí, el saber que estas y que estarás ahí siempre que necesite esa mano que me ayude a levantarme o ese hombro donde recostarme y llorar. Me has enseñado a ser libre, fuerte y sobre todo a confiar en mí.
Amarte cada día es agradecer que me ames con mi pasado, con mis cicatrices, con mis temores, dudas, miedos y desconfianza, es recompensarte cada buena acción que haces cada día para armar lo rota que esta mi alma.
Como te dije una vez cariño “Eres mi sol desde antes de tu si quiera intentar serlo” y es que no recuerdo como me sentía antes de ti sino como lo hago ahora lo plena que me siento, la paz que me hace sentir estar a tu lado convivir contigo es única e irremplazable.
La paciencia que me demuestras tener es lo que me hace atarme más a ti por quererme como el alma enredada y libre que soy, por permitirme volar, aunque no sea a tu lado, por hacer crecer mi esencia, eres luz no lo olvides nunca. Benditos sean aquellos que tropiezan de frente con seres como tú y no puedo negarlo contigo soy egoísta porque no querría que nadie más viese aquello que puedes ofrecer, no puedo evitar que mientras escribo estas líneas que te describen, sienta que me falten palabras para ti.
Eres pasional, la forma en la que tomas mi cuerpo para saciar tu sed es como si estuviese haciendo el amor con dioses, la forma tan sublime en la que me tocas, me besas y me acaricias me hacen sumergirme en el mar de placer que me llevas.
Tan rítmicos los movimientos sincronizados de nuestros cuerpos buscándose uno con otro para así de alguna manera llenar la sensación de querer estar dentro por siempre uno del otro, la conexión tan mágica y única que tenemos es insaciable a nuestros cuerpos, es difícil colmar una sed de ti que siento que no se acaba.
Escuchar la melodía de tus gemidos excitantes, el deleite que provoca a mis sentidos que esperan con ansias sentir aquel orgasmo salir de tu cuerpo, sentir la calidez de tu cuerpo cuando me recuesto en tu pecho y percibo la armonía de tu respiración es cuando me siento justo en el lugar que pertenezco.
Me perteneces de una manera egoísta y no pretendo jamás que alguien supiese el valor que tienes, porque me conozco y aunque ansié tenerte siempre conmigo, te dejaría ser libre.
Y es que por alguna vez me gustaría que estuvieses dentro de mi alma que es el lugar en el que estás seguro por siempre, aquí dentro como lo he declarado yo tu hogar y solamente tuyo amor.
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...